Normalmente, a la hora de tramitar la nacionalidad española necesitarás traducción jurada de un certificado de antecedentes penales, de documentos personales y familiares (certificados de nacimiento, matrimonio, cambio de apellido, etc.), aunque para tramitar la nacionalidad de menores de edad también puedes precisar traducción oficial del consentimiento del otro progenitor o de documentos que certifiquen que este consentimiento no es necesario. Presta mucha atención para escribir todos los nombres y apellidos correctamente, tanto los tuyos como los de tus padres. La jura es un buen momento para adaptar la grafía de tu nombre a la fonética española (sí, es posible).